“Los bebés no pueden comunicarse a través del lenguaje, por lo que la comunicación química es muy importante para ellos”
En un reciente estudio, científicos descubrieron que una sustancia química que se encuentra comúnmente en la cabeza de los bebés recién nacidos desencadena la agresión en las mujeres, pero no en los hombres, según informó el periódico USA Today. El químico hexadecanal (HEX), que es emitido por humanos, no tiene un olor real, pero es algo que la mayoría de los mamíferos pueden sentir, según investigadores del Instituto de Ciencias Weizmann en Israel. Cuando los bebés emiten la sustancia química, desencadena una reacción en las mujeres muy diferente a la que produce en los hombres. Sus hallazgos fueron publicados en la revista Science Advances.
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Los investigadores hicieron una selección aleatoria de 127 participantes que huelen HEX. Los participantes restantes olieron una sustancia química placebo, para poder estudiar los efectos de la sustancia química de los bebés entre los seres humanos. Después de inhalar la sustancia química, los investigadores rastrearon su agresión haciéndoles juegos de computadora que eran “deliberadamente molestos”.
Un juego permitió a los participantes “castigar” al enemigo; con una fuerte explosión de audio mientras les permitía controlar qué tan fuerte era la explosión. Cuando se emite la sustancia química, desencadena una respuesta en el lado izquierdo del cerebro que se sabe que procesa señales sociales como gestos y expresiones. Luego, el cerebro envía el mensaje a una parte llamada amígdala, que controla la agresión en los humanos. El grupo encontró que, para los hombres, la conexión entre la circunvolución angular izquierda. Además, el resto del cerebro aumentó, mientras que, en las mujeres, la conexión disminuyó.
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El coautor del estudio de Mishor, Noam Sobel, agregó que la liberación química también permite que los bebés comuniquen lo que quieren a los adultos. “Los bebés no pueden comunicarse a través del lenguaje, por lo que la comunicación química es muy importante para ellos”, dijo Sobel. “Como bebé, te conviene hacer que tu mamá sea más agresiva; y reducir la agresividad de tu papá”. Los investigadores dijeron que el estudio es uno de los primeros en mostrar un vínculo, entre una sola sustancia química y su efecto en el comportamiento humano. También arroja luz sobre cómo los roles de género juegan un factor en esas reacciones, y más investigaciones pueden mostrar la evolución de los efectos químicos en los humanos.
