El pintor puertorriqueño Luis Álvarez Roure

Luis Álvarez Roure ha tenido el placer de representar a figuras de conocimiento internacional como Cándido Camero, Octavio Vázquez Rodríguez, Larisa Martínez y Paul Volcker, así como amigos y familiares cercanos.

Cuando era joven, Luis Álvarez Roure encontró su pasión por el arte representativo, enseñándose a dibujar a la gente de la forma más realista posible con un gran ojo para el detalle. Nacido en Arecibo en 1976, disfrutó dibujar todo el día en la casa de su abuela por los veranos. Sus padres alentaron sus habilidades, ofreciendo lecciones dirigidas de arte, pero prefirió perfeccionar su capacidad fuera de la academia, preocupado de que podría perder interés si asistía a clases formales. En cambio, se matriculó en clases de piano y desarrolló sus talentos musicales como su carrera primaria. Aunque todavía dibujaba y pintaba en su tiempo libre, la cantidad de tiempo necesario para dedicarse al piano significaba que tenía poco tiempo para dedicar a las artes visuales.

Luis Álvarez Roure se mudó a Nueva York en el 2000 para estudiar música a nivel de posgrado bajo la tutela del músico cubano-estadounidense Germán Diez Nieto. Al mismo tiempo que sus estudios musicales, comenzó a fomentar formalmente su talento artístico a través del Art Students League de Nueva York. En la ciudad, también tuvo la oportunidad de visitar museos internacionales como el Museo Metropolitano de Arte en Manhattan. Además en este momento, sus estudios de piano todavía superaban su interés en el arte dado su enfoque profesional en la música, pero la experiencia de visitar museos y desarrollar su estilo de pintura fue un punto de inflexión en su crecimiento como artista.

En diciembre de 2018, Peter Trippi, el editor de la revista Fine Art Connoisseur Magazine describió el virtuosismo de Roure, diciendo: “En primer lugar, ha perfeccionado su dibujo a través de dibujar constantemente estudios tonales tomados directamente de las obras de maestros pasados… La segunda fuerza de Luis Álvarez Roure es la empatía que siente tan evidentemente con sus modelos. Sus expresiones y poses transmiten el sentido de la vida que viene no sólo a través de la observación, sino también a través de una conexión intuitiva entre personas”.

Fine Art Connoisseur no es la única revista que ha tomado nota de su notable habilidad: publicaciones como Los Angeles Times; además de American Art Collector Magazine, Vanity Fair, Downbeat Magazine, y American Artist Drawing Magazine; también Piano Lessons with Claudio Arrau y el Art Renewal Center Catalog Raisonné han perfilado al artista puertorriqueño.

En los últimos años, Luis Álvarez Roure ha podido enfocarse en los retratos; ha encontrado no solo éxito personalmente, pintando sus iconos musicales como el compositor Philip Glass y el violinista Joshua Bell; pero profesionalmente, sus obras ahora se pueden encontrar en:

• La colección permanente de la Galería Nacional de Retratos del Smithsonian.
• La Reserva Federal en Washington D.C.
• El Museu Europeu d’Art Modern en Barcelona.
• Steinway Hall en la ciudad de Nueva York.

Ha tenido el placer de representar a figuras de conocimiento internacional como Cándido Camero; además de Octavio Vázquez Rodríguez, Larisa Martínez y Paul Volcker, así como amigos y familiares cercanos.

De hecho, fue el retrato titulado “Heridas ocultas” de su amigo Juan Carlos Vásquez Argüelles. Un veterano de la Marina que sirvió en Irak y Afganistán; que fue colgado en la entrada de la exhibición The Outwin 2019: American Portraiture Today. Un fondo sencillo de las rayas rojas y blancas de la bandera estadounidense contrasta con el llamativo rostro de Vásquez Argüelles; mirando hacia adelante con la cabeza levantada y los hombros hacia atrás. Al describir esta obra, Luis Álvarez Roure dice que “[Vásquez Argüelles] es el mismo, pero diferente al mismo tiempo… Su dolor y sus heridas están ocultos”.

Su motivación para crear estos retratos, inspirados en las tradiciones de los viejos maestros, pero arraigados en el realismo contemporáneo. Se basa en su creencia de que los artistas existen para hacer que la vida de otras personas sea más significativa; a través de sus interpretaciones artísticas del mundo. Uno de sus maestros de piano una vez le dijo que no se debe perder el tiempo lamentando lo que uno podría haber logrado o no en el pasado; sino pensar en lo que puede hacer a partir de ahora para lograr lo que quiere. Después de haber sido recientemente nombrado como un “maestro vivo” por el Centro de Renovación de Arte por sus obras de arte bellamente detalladas; Luis Álvarez Roure ahora está en marcha en una carrera artística notable. Ciertamente, su vida y trayectoria son testimonio de esta afirmación.

Para más detalles, visitar: www.alvarezroure.com