“Hay que premiar estos festivales de cine que son actividades exitosas en Puerto Rico en todos los sentidos” – José Artemio Torres
Sentí que deseaba… a mí siempre me gustó escribir de niño. Recuerdo un cuentito que hice de ciencia ficción sobre un planeta que dominaba a otro, como “La Guerra de las Galaxias”. Mi madre una vez a la semana recogía a los muchachos de la calle donde vivíamos en Ponce y nos llevaba caminando al cine Argel que quedaba cerca de la casa. Al principio, mi interés por el cine fue por el mundo de la actuación. Sentí que deseaba ser actor y en la escuela entré al teatro escolar.
La película que me impactó de joven fue la francesa Un Hombre y Una Mujer que dirigió Claude Lelouch en 1966. Una película innovadora, por su guión y cinematografía. Esta película me puso a pensar que detrás de la cámara podía uno contar también la historia. Entré en la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras con la intención de estudiar teatro, pues no había curso de cine, salvo un curso sobre apreciación del cine que daba Luis Trelles.
Escribir sobre… estando en la universidad comencé a escribir sobre crítica de cine para un periódico semanario que se llamó La Hora, para el que luego se me pidió que hiciera las páginas culturales. Hice artículos, fotografías y entrevistas a artistas, y a escritores de esa época como Luis Rafael Sánchez.
En la universidad trabajaba en el Departamento de Audio Visual y proyectaba las películas del Departamento de Actividades Culturales. Estaba viendo a Fellini y a Antonioni y me pegué mucho al cine europeo porque era distinto. Terminando la universidad supe del London Film School, solicité, me aceptaron y me fui para allá.
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De regreso… en la escuela en Londres hice dos cortos de ficción y al regresar a Puerto Rico hice un documental sobre las Fiestas de Cruz que había conocido en Ponce. Cuando dirigí el Programa de Cine por tres años en el Instituto de Cultura Puertorriqueña, hice ocho folletos sobre cine, y se creó la primera cinemateca y el programa Teatro del Patio donde presentábamos películas de diferentes directores, y países, y cine nacional dos veces a la semana. Eso fue bien interesante.
Lamentablemente el teatro que ahora se llama Lucy Boscana lleva años cerrado, en donde está la Galería Nacional. En proceso estoy haciendo el documental Antonia sobre la estudiante Antonia Martínez Lagares. El motivo es mantener vivo ese caso que ocurrió en 1970 y que no se ha resuelto. No ha sido convicto el que cometió el crimen. Además, yo tengo un interés particular porque viví en ese hospedaje y estaba al lado de ella cuando la mataron.
Mi comienzo con el Festival… comenzó con una evolución, un movimiento. Empezó con el Festival Cine San Juan, en 1988, que ofrecía el Cine Caribeño, en donde participé como jurado. En el 1989 un grupo de cinéfilos crea el San Juan Cinemafest para presentar cine internacional. Se juntan los dos en 1992 y coexisten la Competencia Caribeña y la Muestra del Cine Mundial bajo el nombre de San Juan Cinemafest. Al juntarse estos dos grupos comienzo a dirigir el Cinemafest en el 1993 e ¡hicimos un grupo activo bien chévere! En el 2007, la junta del festival decide terminarlo por varias razones.
Entonces el grupo decidió continuarlo y se creó el Festival de Cine Internacional de San Juan que actualmente dirijo. Es importante puntualizar que nosotros fuimos los primeros en crear el público de cine internacional en Puerto Rico y toda esta actividad económica que existe actualmente. Nosotros, junto a otros festivales que han surgido, somos la razón por la que existan catorce salas de cine para este tipo de películas. Seis en Hato Rey, seis en Miramar y dos en el Viejo San Juan.
Festival de Cine Internacional de San Juan…. este festival de cine es una actividad que genera mucho interés porque tiene publicidad: tiene una oferta nueva y distinta. Siempre digo que las películas que se ofrecen en el Festival de Cine Internacional de San Juan no se van a volver a dar en Puerto Rico, son pocas las películas que nosotros damos que se estrenan luego en Fine Arts. Eso es un motivo para ir. Nuestro festival va al resto de la Isla. Vamos a San Juan, Ponce, Caguas, Mayagüez, Manatí, Vega Baja, Guayama y universidades, y damos películas al aire libre.
Fuimos los primeros en traer cine coreano, que es muy popular internacionalmente, y cine africano, de China, Alemania, Taiwán, Chile, Vietnam, Dinamarca, India, Israel… en fin, de todas partes del mundo. Considero que la programación que siempre mostramos es una de la mejores de cualquier festival. Este festival, además de aportar a nuestra cultura cinematográfica, ha abonado grandemente a la apreciación del cine de calidad en Puerto Rico. Pero los festivales requieren apoyo: es mi opinión que el gobierno tiene que tomar una iniciativa activa. Hay que premiar las actividades exitosas y estos festivales de cine son actividades exitosas en Puerto Rico en todos los sentidos.
Una pregunta más a José Artemio Torres ¿por qué es tan difícil mantener económicamente un festival?… porque el gobierno no reconoce la importancia económica que han tenido los festivales. Tampoco lo comprenden la empresa privada, las agencias publicitarias y los anunciantes en términos del público. La gente va mucho al cine de festivales, este cine gusta mucho. Nosotros quizás tengamos más salas de cine de arte que Bogotá, y que muchas otras ciudades.
El impacto económico es bien grande. El perfil del público que va al Festival es de persona profesional que gasta dinero y es alto consumidor. Tanto que deja el cine al gobierno de Puerto Rico y éste no les retribuye a los festivales ni a la producción cinematográfica local. Han recortado todo el apoyo de la Legislatura, y hay que pelear con el programa de cine para que nos den algo. Sin embargo, hemos creado ese público que deja un montón de dinero al gobierno y a la economía y da empleo. Mientras continúa creciendo la industria de los festivales de cine en lugares como Panamá, Curazao, República Dominicana, Trinidad y muchos otros países con un gran apoyo por parte de identidades de gobierno y privadas, nosotros hemos echado para atrás.
Gente como ese caballero carga a Puerto Rico , son muchos como el que creen en nuestro País, como bien lo dijo tanto que aporta el cine y tan poco que ellos hacen por el cine local y se alborotan cuando vienen de afuera a filmar , y eso está chevere pero luego de cuidar a los nuestros , a los que guardan y cuentan nuestra historia . Mi oficina en la calle Csnsls el la ocupo cuando me fui de allí ….